¿Cuál es el País con el Futuro más Brillante de África?
Ghana: Un Viaje Desde la Promesa hasta el Desafío Económico
A menudo, cuando se habla de éxitos económicos en diversos medios, los protagonistas suelen ser países europeos, asiáticos o norteamericanos. Pero, ¿qué pasa con los países africanos? Aunque no es lo más común encontrar ejemplos de grandes avances económicos en África, las últimas décadas nos han dejado algunas sorpresas. Hoy hablaremos de una de ellas: Ghana.
El Ascenso de Ghana
Situada en la parte occidental de África, Ghana limita con Burkina Faso, un país que ha sufrido por el yihadismo. Sin embargo, Ghana ha logrado destacarse como un ejemplo de lo que los países africanos pueden hacer para prosperar. Este país, que ha tenido al oro como uno de sus motores económicos, es el mayor productor de oro de África y el sexto en el mundo. Con un Producto Interno Bruto per cápita de $6,500 en Paridad de Poder Adquisitivo (PPA), Ghana ha sido en las últimas décadas una historia de crecimiento económico acelerado y estabilidad política, al punto de ser considerado un alumno ejemplar en todo el continente.
Un Comienzo Turbulento
A pesar de su crecimiento reciente, los comienzos de Ghana como nación soberana tras su independencia en 1957 no fueron del todo tranquilos. El país pasó por una espiral de violencia y corrupción con sucesivos líderes autoritarios y golpes de Estado, desde Kwame Nkrumah, que soñaba con una unión africana socialista, hasta los gobiernos militares del teniente general Ankrah, el brigadier Afrifa y el coronel Acheampong.
En 1981, un nuevo golpe de Estado trajo al poder a Jerry Rawlings, quien se proponía dar un nuevo giro al país. Para 1983, Ghana sufría una intensa crisis financiera, lo que llevó a Rawlings a pedir ayuda al Fondo Monetario Internacional (FMI). La ayuda del FMI marcó un punto de inflexión para el país, que comenzó a reducir el gasto público, eliminar controles de precios, devaluar la moneda y privatizar empresas. Estas medidas sentaron las bases para un período de casi 30 años de crecimiento sostenido.
El Boom del Petróleo
En 2007, Ghana descubrió un yacimiento de petróleo en su zona marítima, llamado Jubilee, cuya explotación desde 2011 ha convertido al petróleo en la segunda mayor exportación del país, después del oro. Esta inyección de recursos permitió al gobierno mejorar significativamente la economía.
Retos Persistentes
A pesar de estos avances, Ghana ha enfrentado desafíos persistentes. El crecimiento económico y la estabilidad política no se tradujeron en un cambio estructural suficiente para erradicar la pobreza. Casi el 25% de la población sigue viviendo en condiciones de extrema pobreza, y la falta de una educación básica y de capacitación avanzada ha limitado el desarrollo industrial del país.
La Crisis de la Deuda
Cada historia de éxito tiene su final, y el caso de Ghana no fue la excepción. La caída en los precios de las materias primas tras la elección del presidente Mahama en 2012 llevó al país a recurrir nuevamente al FMI debido al aumento del déficit público. La situación empeoró bajo el mandato de Nana Akuffo-Addo, quien, a pesar de reducir impuestos y lanzar ambiciosos planes de gasto social, incrementó la deuda pública. La pandemia de COVID-19 exacerbó esta tendencia, provocando un repunte de la deuda pública en 40 puntos del PIB en tan solo tres años.
Las Consecuencias del Sobreendeudamiento
El endeudamiento masivo llevó a Ghana a devaluar su moneda y enfrentar una tasa de inflación récord del 50% en 2022. Las políticas de ajuste y las ayudas del FMI vinieron acompañadas de la necesidad de reestructurar la deuda pública y ajustar el gasto.
Lecciones para el Futuro
El caso de Ghana no es único en África, un continente que se enfrenta a muchos de los mismos desafíos económicos, como el encarecimiento de la financiación debido a la subida de tipos en Estados Unidos y Europa, y la competencia por capitales internacionales. Etiopía, Nigeria y Zambia son ejemplos de países que también luchan con estos problemas.
El Futuro de Ghana
A pesar de los problemas, Ghana todavía posee un gran potencial gracias a sus recursos naturales y su ubicación estratégica. El regreso a las políticas de estabilidad macroeconómica y una mayor inversión en educación e infraestructuras serán cruciales para que el país pueda continuar su trayectoria de desarrollo y dejar atrás los fantasmas de la deuda y la pobreza.
La pregunta es: ¿Podrá Ghana superar los desafíos actuales y volver a convertirse en un ejemplo a seguir para África y el mundo? Solo el tiempo lo dirá, pero una cosa es segura: la historia de este país sigue siendo una fuente de valiosas lecciones para todos nosotros.
Conclusión
La historia de Ghana es un recordatorio de cómo un país puede pasar de ser una promesa económica a enfrentar graves retos debido a la gestión inapropiada de los recursos y el endeudamiento excesivo. Sin embargo, también nos muestra la importancia de políticas económicas sólidas, la ayuda internacional bien manejada y la constante inversión en educación e infraestructuras para el desarrollo sostenible.
Este artículo invita a reflexionar sobre las decisiones que llevaron a Ghana a su situación actual y sobre las medidas necesarias para que no solo este país, sino todo el continente africano, pueda finalmente superar los obstáculos históricos y llegar a un futuro de prosperidad.