¿Es posible PREVENIR la inminente CRISIS GLOBAL?
¿Estamos a Punto de Vivir una Nueva Crisis Económica?
Querida comunidad del mundo financiero, una sombra se cierne sobre la economía global y podría ser una de las más oscuras vistas en esta generación. ¿Estamos a las puertas de una nueva crisis mundial o hay margen para la esperanza? Los pronósticos económicos pintan un panorama dual. La economía estadounidense, por ejemplo, ha experimentado un decrecimiento en su Producto Interno Bruto (PIB) por dos trimestres consecutivos, con una reducción del 1,6% anual. Este es un claro indicativo de una recesión, algo que muchos ya anticipábamos.
Para combatir la inflacion galopante, los bancos centrales en Occidente han aumentado las tasas de interés. Este incremento trae implicaciones significativas. Primero, tanto empresas como familias y gobiernos enfrentarán mayores pagos de intereses, lo que erosiona el poder adquisitivo. Segundo, el costo de endeudarse para emprendimientos o compras de viviendas subiría, reduciendo la demanda de bienes y servicios a una velocidad alarmante. Sin duda, estos factores serán los precursores de la próxima recesión, cuyos efectos ya se sienten en la economía real, particularmente en el sector de la construcción en Estados Unidos, donde la oferta supera la demanda de viviendas de manera considerable.
Nubes Oscuras Sobre la Economía Estadounidense
¿Un Estancamiento Inevitable?
El mercado inmobiliario estadounidense ofrece un espectáculo preocupante. Las constructoras se enfrentan a dificultades enormes con propiedades que no logran vender mientras que los compradores estadounidenses han frenado sus adquisiciones. El enfriamiento de la economía estadounidense es real y podría tener consecuencias globales significativas. No es casualidad que se diga que cuando Estados Unidos estornuda, el mundo se resfría. Vigilar el desarrollo económico en Estados Unidos nos dará pistas claras sobre lo que se avecina para otras economías.
Un Soplo de Esperanza entre las Nubes
Sin embargo, no todo es desánimo. Existe una corriente de economistas que sostiene que la supuesta crisis económica inminente podría no materializarse. Aunque la economía se desacelere en los próximos meses, estos expertos aseguran que se trataría de una simple corrección de mercado antes de un nuevo periodo de prosperidad. De acuerdo con estos analistas, la fortaleza económica actual desafía los pesimistas pronósticos.
Así que, ¿a quién creer? ¿Habrá una nueva crisis o deberíamos mantener la calma? En Visual Economic, siempre creemos en el valor del análisis crítico y la diversidad de opiniones es esencial, especialmente en una ciencia tan voluble como la economía. Con esto en mente, queremos presentar razones que podrían justificar un optimismo moderado.
La Economía Estadounidense: ¿Contradictoria pero Resiliente?
El Paradojal Crecimiento del Empleo
A pesar del decrecimiento del PIB, la creación de empleo en los Estados Unidos ha mostrado cifras inesperadas. En julio de 2022 se alcanzó el número más alto de creación de empleos en los últimos cinco meses. Es algo que no encaja fácilmente con la lógica económica dominante, pues en una recesión se espera destrucción de empleo, no su creación.
El desempleo en Estados Unidos está en su punto más bajo desde 1969, contraviniendo la teoría de que los altos tipos de interés y la elevada inflación destruirían empleo. Este sorprendente fenómeno ha desconcertado a los analistas y su explicación radica en varios factores.
Factores Detrás del Comportamiento del Empleo
Primero, aunque la economía se está enfriando, la oferta de empleo ha alcanzado niveles récord mientras que la población activa —es decir, gente dispuesta y capaz de trabajar— ha disminuido. Este abandono masivo del mercado laboral se debe, en parte, al envejecimiento de la población y en mayor medida a adultos en edad laboral que prefieren no trabajar. Según Jason Forman, de la Universidad de Harvard, cerca del 70% de esta población desocupada son adultos menores de 55 años.
Curiosamente, este fenómeno podría tener un lado positivo. Muchas de estas personas han podido mantenerse fuera del mercado laboral gracias a los significativos ahorros acumulados durante la pandemia, en parte gracias a los estímulos fiscales. El elevado nivel de ahorro ha permitido a muchos optar por no trabajar.
El Impacto de los Tipos de Interés y los Ahorros
Los Efectos de la Subida de Tipos
Para combatir la inflación y gestionar las deudas, la Reserva Federal ha subido los tipos de interés. Esto afecta directamente los ahorros, ya que muchos hogares han utilizado sus ahorros para pagar deudas. Este incremento de intereses tendrá un doble efecto: erosionará los ahorros a la vez que impulsará a más personas a regresar al mercado laboral para afrontar nuevos intereses y gastos.
La Reserva Federal y Sus Opciones
La Reserva Federal tiene un mandato dual: controlar la inflación y promover el crecimiento económico. En un escenario de crisis, la Fed podría reducir los tipos de interés para estimular el crecimiento. Todo indica que, de ser necesario, recurriría a este recurso para evitar una recesión prolongada. Esta flexibilidad es una ventaja significativa que podría brindar estabilidad a la economía estadounidense.
¿Qué Implica Esto para el Resto del Mundo?
Impacto en América Latina
La recuperación económica de Estados Unidos es una buena noticia para regiones como América Latina, ya que muchos países de esta región son grandes exportadores de materias primas. La escasez mundial de crudo podría beneficiarlos considerablemente. No obstante, cada país tiene sus particularidades y la situación es más compleja en algunos lugares que en otros. Por ejemplo, es imposible comparar la situación de Venezuela con la de Uruguay.
Impacto en Europa
En Europa, la situación es más delicada. Países del sur como España están viendo cifras de destrucción de empleo muy altas. La enorme deuda pública en estos países amenaza la estabilidad del euro. Además, la guerra en Ucrania añade un nivel adicional de incertidumbre. Las medidas para aliviar la inflación, como el fin de los cuellos de botella en Asia y la bajada del precio de materias primas, aún están por verse. Sin embargo, la expectativa para Europa no es tan positiva como la de Estados Unidos.
Conclusión: Un Futuro de Alerta y Esperanza
El panorama económico global es incierto, pero no del todo sombrío. La economía estadounidense, a pesar de sus contradicciones, muestra señales de resiliencia que podrían evitar una recesión drástica. La recuperación de otros países dependerá en gran medida de sus propias políticas fiscales y monetarias y de cómo manejen las variables internacionales como la inflación y las tensiones geopolíticas.
El debate sobre si esta desaceleración es el preludio de una nueva crisis o simplemente una corrección temporal será un tema recurrente en los próximos meses. Entretanto, mantener un enfoque crítico y optimismo moderado basado en datos sólidos será esencial para navegar estas aguas turbulentas.