El Auge del Imperio Chino en el Territorio Ruso: Un Análisis Detallado

La Inquietante Realidad de la Influencia de China en Asia Central

Después de más de un año desde el inicio de la pandemia de COVID-19, todos nos hemos convertido en expertos a pequeña escala en temas relacionados con pandemias. Sin duda, en alguna ocasión hemos debatido sobre las diferentes vacunas, pruebas PCR, test de antígenos, o incluso el origen del virus. Pero, lo que quizás no todos sepamos es sobre la existencia de una vacuna menos renombrada: la vacuna uzbeko-china, conocida como ZF-UZ-VAC2001.

Este artículo no pretende adentrarse en los aspectos bioquímicos de esta vacuna, sino en la relación entre China y Uzbekistán y, en general, la influencia de China en Asia Central. Es fascinante explorar cómo estos dos países decidieron colaborar para producir esta vacuna y qué es lo que los une realmente.

Una Región Estratégica: Asia Central

Para entender la importancia de la colaboración chino-uzbeka, es crucial primero situar la región en la que se encuentran. Asia Central comprende Kazajistán, Uzbekistán, Kirguistán, Tayikistán y Turkmenistán. Esta área ha sido objeto de interés de las grandes potencias globales desde el siglo XIX, y hoy no es distinto. La influencia en la región se disputan entre Rusia, Estados Unidos, Turquía, India, Pakistán y, por supuesto, China.

China ha estado invirtiendo en Asia Central durante años, construyendo infraestructuras, enviando mano de obra y controlando una parte significativa de la deuda externa de estos países. En este contexto, examinar qué está haciendo China en Asia Central, quién sale ganando y si esta región se está convirtiendo en el nuevo campo de expansión del imperio chino moderno es realmente esencial.

Diferencias Económicas: David y Goliat en el Comercio

Asia Central y China representan una de las fronteras más desiguales del mundo en términos económicos. El Producto Interno Bruto (PIB) de China es 50 veces mayor que el de todos los países de Asia Central combinados. Mientras que China emerge como un Goliat económico frente a un David representado por países como Tayikistán, la relación entre ellos no es de conflicto, sino de comercio.

China es uno de los principales inversores y acreedores en Asia Central, con un notable interés en el sector energético. Desde plantas hidroeléctricas en Kazajistán y préstamos para modernizar centrales hidroeléctricas en Uzbekistán, hasta rutas de la Nueva Ruta de la Seda que cruzan la región, las inversiones chinas no se detienen. La corrupción y la falta de transparencia en estos países convierten estas inversiones en apuestas riesgosas, llevando a China a enfocarse en proyectos más pequeños en los últimos años.

La Expansión del Poder Blando: Educación y Cultura

La influencia de China en Asia Central no se limita exclusivamente al ámbito económico. El «poder blando» de China se manifiesta en varias formas, desde la financiación de escuelas y universidades donde se enseña chino, la apertura de Institutos Confucio en la región, hasta programas de becas para estudiantes centroasiáticos que desean estudiar en China.

En los últimos quince años, China ha destinado 54 mil millones de dólares a inversiones y construcción en Asia Central, casi el equivalente del PIB de Uzbekistán. Este poder blando es una nueva realidad de la influencia china, que en Occidente aún desconocemos.

Seguridad y Tecnología: Vigilancia en Asia Central

Otro aspecto común entre China y Asia Central es su interés en la tecnología y el control. Proyectos como las «ciudades seguras» desarrollados por Huawei en Tayikistán y Uzbekistán, basados en la vigilancia constante y el reconocimiento facial, destacan la colaboración tecnológica. En este contexto, la seguridad también parece servir para mantener el control de las élites en el poder.

Presencia Militar: La Expansión de China

China también ha comenzado a establecer una presencia militar en Asia Central. La base militar china en Tayikistán, cerca de la frontera afgana, ilustra este interés militar. Esta presencia es un salto significativo para China, que hasta ahora había mantenido relaciones puramente económicas en la región. Esto marca la ambición de China de asumir un rol más activo y dominante.

Diplomacia de Vacunas: Estrategia COVID-19

Durante la pandemia, China ha reforzado su influencia a través de la diplomacia de vacunas. La vacuna uzbeko-china ZF-UZ-VAC2001, desarrollada por Anhui Zhifei Longcom y la Academia China de Ciencias, incorpora a Uzbekistán como coautor gracias a su participación en los ensayos. Otros países como Pakistán y Ecuador también participaron, pero Uzbekistán fue el primer país en aprobar esta vacuna, abriendo así las puertas de la región a las vacunas chinas.

Los Beneficios para China en Asia Central

La política exterior china ha evolucionado significativamente en los últimos cincuenta años, y Asia Central se ha convertido en un componente clave de esta estrategia. China comparte una frontera terrestre de más de 3000 kilómetros con Kazajistán, Kirguistán y Tayikistán, y culturalmente, muchos ciudadanos chinos tienen raíces en los países de Asia Central.

Además, China ha estado consumiendo más energía de la que produce desde 1993, haciendo que los recursos energéticos de Asia Central sean cruciales. Con la creación de la Nueva Ruta de la Seda en 2013, Asia Central se convirtió en un nexo vital para conectar los productos chinos con los mercados europeos.

El Papel de Asia Central en la Estrategia de China

Después de la caída de la Unión Soviética, los países de Asia Central se convirtieron en las naciones más pobres del espacio postsoviético. La relaciones económicas interdependientes entre estas naciones colapsaron, y solo China se mostró dispuesto a invertir en la región sin condiciones relacionadas con reformas políticas o derechos humanos.

Estos países reciben los créditos chinos como un maná caído del cielo. Sin embargo, la relación no es perfecta. La dependencia de infraestructuras, maquinaria y mano de obra chinas, sumada a la resolución de controversias en tribunales chinos, crea una dependencia significativa. La corrupción endémica en la región añade una capa de complejidad, y muchas inversiones no ofrecen el rendimiento esperado.

La Trampa de la Deuda: Consecuencias Eventuales

China controla un porcentaje significativo de la deuda externa en varios países de Asia Central. En Kirguistán, esto representa el 42%, en Tayikistán el 40%, en Uzbekistán el 20% y en Kazajistán el 10%. La falta de transparencia en países como Turkmenistán dificulta obtener datos precisos.

Para China, prestar dinero a países con alta posibilidad de incumplimiento puede parecer una estrategia arriesgada. La teoría de la «diplomacia de la trampa de la deuda» sugiere que China no espera recuperar estos préstamos, sino crear una dependencia política. Aunque esto es sólo una teoría, la influencia política de China queda clara.

La Deuda: Soluciones Creativas y Problemas Persistentes

Enfrentarse a la deuda con China ha llevado a soluciones tan insólitas como pedir donaciones públicas, como hizo Kirguistán. Aunque la respuesta fue mínima, las élites políticas en Asia Central parecen beneficiarse de la corrupción y la falta de transparencia, lo que perpetúa el problema.

Para solventar estas deudas, algunos países ceden derechos de explotación de recursos naturales a China. En Tayikistán, el 80% de las minas de oro están bajo control chino. Además, hubo una cesión territorial de más de mil kilómetros cuadrados a China en 2011. En Kirguistán, la economía depende en gran parte de remesas, lo que complicó aún más la situación durante la pandemia.

Conclusión: La Compleja Relación de Dependencia

La relación entre China y los países de Asia Central es multifacética y compleja. Aunque la inversión y la cooperación ofrecen beneficios económicos y han permitido el desarrollo de infraestructura y educación, los riesgos de dependencia y pérdida de soberanía son significativos. La influencia de China en la región sigue expandiéndose, y el equilibrio de poder se transforma constantemente.

Ahora, la pregunta es para vosotros: ¿qué os parece esta dinámica? ¿Podrán los países de Asia Central beneficiarse de los créditos de China sin caer en una mayor dependencia? Sin duda, la influencia de China seguirá moldeando el futuro de Asia Central.

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