Cómo Japón Aspira a Equilibrar el Poder Frente a China
Japón: Una Dinámica Política que Sorprende
Japón es uno de esos países que sorprende por los cuatro costados. Dentro de todas las cosas que nos pueden sorprender, una de las que más puede llamar la atención es, precisamente, la política. Desde la caída del Imperio de Japón en 1945, el país ha tenido unos 35 primeros ministros, un promedio de un Primer Ministro cada dos años, a pesar de que el mandato ordinario es de cuatro años. La inestabilidad del puesto puede asemejarse al cambiante panorama de entrenadores de equipos de fútbol como el Manchester United o el Chelsea en la última década.
Estabilidad en la Inestabilidad
A pesar de ser un país con tantos cambios de liderazgo, una característica fundamental de la política japonesa es su notable estabilidad. Desde la llegada de la democracia a Japón a finales de los años 50, únicamente ha gobernado un partido político, el Liberal Democrático, y organizaciones de su órbita. Solo ha habido un breve paréntesis de dos años en los que un gobierno opositor llegó al poder. No es una dictadura, aunque se podría considerar una democracia algo imperfecta, más bien una democracia que funciona bajo los órganos algo democráticos de su principal partido político.
El Rompecabezas Político
En Japón, los rifirrafes políticos se libran especialmente en los pasillos y los despachos, convirtiendo la política nipona en un verdadero rompecabezas de idas y venidas, dimisiones, elecciones anticipadas y mociones de censura. El actual Primer Ministro, Fumio Kishida, llegó al poder en octubre de 2021 tras la dimisión de su predecesor, Yoshihide Suga, quien estuvo tan solo un año en el cargo. Sin embargo, el papel que ejercerá Kishida podría representar un cambio significativo respecto a sus antecesores.
Fumio Kishida: Un Viejo Conocido con Nuevas Ideas
Kishida, a diferencia de otros nuevos líderes mundiales como el presidente de Corea del Sur Yoon Seok Yeol, no es un outsider de la política. Es un veterano político miembro de la Cámara de Representantes desde 1993, y ha ocupado diversos cargos importantes, incluyendo Ministro de Estados Para los Asuntos de Okinawa, Ministro de Defensa y Ministro de Asuntos Exteriores bajo el mandato de Shinzo Abe. Se espera que Kishida dé un giro importante a las políticas de Abe dentro de Japón, manteniendo un cierto continuismo en la política exterior, pero con un incremento significativo del gasto en defensa.
Japón y su Rol en el Tablero Mundial
Bajo la dirección de Shinzo Abe, Japón intentó regresar a la escena internacional con medidas más duras hacia China y Corea del Norte, protegiendo aliados como Taiwán y liderando el Acuerdo de Libre Comercio Transpacífico. Esta postura ha contribuido a que Japón aumente su actividad en la política internacional y su fuerza militar. Fumio Kishida no solo busca continuar con esta tendencia, sino que quiere ir más allá, promoviendo un ambicioso plan para mejorar las capacidades militares del país.
Aumentar el Presupuesto Militar
El Partido Liberal Democrático de Japón ha propuesto duplicar el presupuesto de defensa, llevando el gasto militar del país hasta alrededor de 100 mil millones de dólares. Es decir, Japón se posicionaría como la tercera superpotencia con mayor presupuesto militar, solo por detrás de Estados Unidos y China. La guerra en Ucrania ha cambiado la perspectiva global, y Japón, con Kishida al mando, ha aprovechado la coyuntura para acelerar sus planes de incremento de defensa.
Relaciones Internacionales: Una Nueva Estrategia
Japón, bajo el liderazgo de Kishida, ha comenzado a ver la importancia de estrechar aún más los lazos con Estados Unidos y Corea del Sur. Las relaciones entre Corea y Japón, tradicionalmente tensas, podrían estar al borde de un cambio significativo. Corea del Sur ha decidido unirse al CPTPP y el presidente surcoreano Yoon Seok Yeol ha mostrado interés en formar parte de la alianza Quad. Una colaboración más cercana entre Japón y Corea del Sur podría tener un impacto económico y militar gigantesco en la región.
Desafíos y Oportunidades en Política Exterior
Japón y Corea del Sur son países económicamente poderosos y tecnológicamente avanzados, y una alianza más fuerte podría equilibrar el poderío de China en la región. Aunque lograr una cooperación plena entre estos países sería un desafío, representa una oportunidad titánica para reconfigurar el panorama político y económico del Asia-Pacífico. Las tensiones y disputas territoriales con Rusia también subrayan la necesidad de una política exterior robusta, especialmente en el contexto de la invasión rusa a Ucrania y las disputas por las Islas Kuriles.
Reformar la Economía: Una Nueva Visión Capitalista
Kishida tiene un enfoque claro: reinventar la economía nipona desarrollando una especie de «capitalismo japonés». Este plan incluye políticas expansivas de gasto público y una mayor redistribución de la riqueza. La premisa básica es aplicar recetas keynesianas de gasto público, aunque Kishida pretende ir un paso más allá.
Políticas de Gasto Público y Redistribución
El nuevo presupuesto récord para 2022 incluye 107,6 billones de yenes (aproximadamente 900 mil millones de dólares) destinados a medidas contra el coronavirus, costos de seguridad social y defensa nacional. Además, Kishida ha desvelado un paquete de estímulos de 490 mil millones de dólares, con una parte considerable destinada a apoyo financiero directo a hogares con hijos, trabajadores y pequeñas y medianas empresas.
Impuestos y Deuda
Kishida planea incrementar los impuestos a las grandes empresas y las rentas más altas, y continuar emitiendo deuda pública, que ya se sitúa en el 253% del PIB. Esta política ha generado preocupación respecto a una posible crisis del yen japonés. La reciente caída del yen es un indicativo del pánico en el mercado, influenciado por las políticas ultrarelajadas del Banco de Japón.
Salarios y Productividad
El Primer Ministro también busca aumentar los salarios mínimos, las pensiones y promover incrementos salariales en las empresas mediante incentivos fiscales. Sin embargo, las empresas japonesas tienen tasas de rentabilidad más bajas que sus comparables internacionales y una productividad 30% inferior a la media del G7. Esto podría complicar la implementación efectiva de estas políticas.
Conclusiones y Futuro
El nuevo enfoque de Kishida combina un impulso para fortalecer la posición política internacional de Japón, aumentar el gasto militar y mejorar las relaciones con Estados Unidos y Corea del Sur, además de reinventar su economía mediante políticas expansivas de gasto público y redistribución de la riqueza. Si bien su enfoque sigue generando preguntas y enfrenta diversos desafíos, la dirección que tome Japón bajo el liderazgo de Kishida será crucial para entender el futuro del país del sol naciente en el contexto global.
Ahora, te toca a ti: ¿Crees que Japón se convertirá en un actor clave en el Asia-Pacífico? ¿Qué piensas del plan del nuevo Primer Ministro?