¿Por qué Delaware Es la Mejor Elección para Tu Negocio en Estados Unidos?
Delaware: El Corazón Comercial de Estados Unidos
Cuando pensamos en el epicentro económico de Estados Unidos, lo primero que nos viene a la mente es Nueva York, hogar de los lobos de Wall Street, o California, donde se encuentran los gigantes tecnológicos de Silicon Valley. Sin embargo, la verdadera capital comercial del país es Delaware, específicamente en Wilmington. Este estado ha logrado atraer a algunas de las empresas más grandes y poderosas del mundo, incluyendo Amazon, Coca-Cola, Facebook, General Electric y Google. Sorprendentemente, muchas de estas empresas tienen su dirección comercial registrada en 1209 North Orange Street, un edificio que no destaca por su impresionante skyline, pero que alberga más de 300,000 empresas.
Más Empresas que Personas
Delaware, a pesar de ser el segundo estado más pequeño de Estados Unidos, es una potencia en el mundo de los negocios. Con menos de 200 kilómetros de punta a punta y una población que apenas roza el millón de habitantes, Delaware ha logrado atraer a un número incomparable de empresas. Pero, ¿cómo pudo un estado tan pequeño convertirse en el epicentro de las corporaciones multinacionales?
El Ascenso de Delaware
Todo empezó a finales del siglo XIX. En esa época, era común que las empresas registraran su sede comercial en el estado donde operaban. Sin embargo, Nueva Jersey fue uno de los primeros estados en darse cuenta del potencial de negocio que implicaba atraer a empresas de otros estados al ofrecerles ventajas fiscales. Este movimiento resultó en una migración masiva de corporaciones a Nueva Jersey. Viendo el éxito de esta estrategia, otros estados como Arizona y Maine intentaron replicar el modelo con diferentes grados de éxito.
Delaware y la Carrera hacia la Cima
Fue Delaware quien finalmente perfeccionó este modelo. Desde 1913, este estado se ha convertido en la «meca del business» en Estados Unidos. Actualmente, hay más de un millón de empresas registradas en Delaware, superando en número a su población. Este éxito se debe a un entorno favorable para hacer negocios, que ofrece suficiente confianza a accionistas, empresarios e inversores. En Delaware, no es raro encontrar abogados, economistas y contables en cada esquina, todos especializados en servicios corporativos.
El Paraíso Fiscal de Delaware
Delaware es famoso por su estatus como paraíso fiscal, aunque esta denominación puede ser engañosa. Las empresas en Delaware aún pagan impuestos federales, como cualquier otra empresa en Estados Unidos. Sin embargo, hay ciertos tipos de sociedades empresariales, conocidas como LLCs, que están exentas del impuesto estatal del 9% si no operan dentro del estado.
Beneficios Fiscales
El 64% de las empresas del Fortune 500 están registradas en Delaware. Una estrategia fiscal bien planeada puede reducir los impuestos entre un 10% y un 40%. Algunos expertos calculan que otros estados pierden entre 6,500 y 9,500 millones de dólares debido a lo que se conoce como «la escapatoria de Delaware». Un ejemplo de este ingenio fiscal es Toys «R» Us, que creó una sociedad en Delaware llamada Geoffrey LLC a la que transfirió los derechos de imagen de su mascota, la jirafa Geoffrey. Esto permitió a la empresa enviar gran parte de sus ingresos a Delaware, exentos del impuesto estatal, y al mismo tiempo disminuir sus beneficios declarados.
El Impuesto de Franquicia
Como compensación por los beneficios fiscales, Delaware cobra a las empresas el «franchise tax», un impuesto anual basado en el tamaño de la empresa. Este impuesto puede variar entre 175 y 250 dólares para las empresas más pequeñas, y hasta 200,000 dólares para las grandes corporaciones. Aunque las empresas aún pagan un 21% de impuestos federales sobre sociedades, lo que hace a Delaware atractivo no son solo los impuestos, sino también la previsibilidad de sus tribunales.
El Tribunal de Cancillería
Uno de los mayores atractivos de Delaware para las empresas es su Tribunal de Cancillería y su Tribunal Supremo, que son conocidos por su pericia en asuntos comerciales. Estos tribunales proporcionan una legislación y jurisprudencia muy favorables para los negocios, lo que reduce las incertidumbres legales. Además, los jueces de Delaware son conocidos por ser poco amigos de las demandas frívolas de los accionistas, que pueden ser una molestia para las empresas.
Conflictos y Resoluciones
Los tribunales de Delaware son famosos por su manejo eficiente y experto de los litigios comerciales. Por ejemplo, en un caso reciente, el Tribunal Supremo de Delaware rechazó reabrir una demanda de un accionista contra Uber por una inversión fallida en una startup. La razón fue que el accionista no había levantado su queja en el momento oportuno. Este tipo de decisiones ilustra la previsibilidad y la razonabilidad de los tribunales de Delaware.
La Transparencia Corporativa
A pesar de sus ventajas, el modelo de Delaware no está exento de críticas. Una de las principales preocupaciones es el «capitalismo fantasma» y la falta de transparencia corporativa. Registrar una empresa en Delaware es extremadamente sencillo y requiere mínimos datos, lo que facilita la creación de empresas fantasmas. Estos vehículos pueden ser utilizados por políticos corruptos, terroristas y narcotraficantes para lavar dinero y ocultar actividades ilegales.
Regulaciones en Desarrollo
En vista de estos problemas, hay esfuerzos en marcha para aumentar la transparencia corporativa. La Ley de Transparencia Corporativa, que el Senado de Estados Unidos está examinando, obligaría a las empresas a revelar sus verdaderos propietarios a una agencia federal. Esta medida busca cerrar las puertas a la opacidad que ha permitido a delincuentes de varios tipos ocultar sus actividades.
El Futuro de Delaware
El futuro de Delaware como centro comercial podría cambiar significativamente si se aprueban nuevas leyes para aumentar la transparencia corporativa. No obstante, la especialización y la experiencia acumulada durante más de un siglo en el ámbito corporativo le aseguran a Delaware un lugar prominente en la economía estadounidense. La verdadera pregunta será si puede adaptarse a las nuevas demandas de transparencia y seguir siendo competitivo en el entorno global de negocios.
Conclusión
Delaware ha logrado algo extraordinario al convertirse en el corazón comercial de Estados Unidos. Con una combinación de ventajas fiscales, un marco legal favorable y un entorno altamente especializado, este pequeño estado ha atraído a algunas de las empresas más poderosas del mundo. Sin embargo, los desafíos de la falta de transparencia y las nuevas regulaciones significan que Delaware deberá adaptarse para mantener su posición dominante en el mundo de los negocios.
Lo que es claro es que Delaware no es solo un paraíso fiscal; es un símbolo de una forma de hacer negocios que ha prosperado durante más de un siglo. Con un ojo en el horizonte y otro en sus raíces, Delaware seguirá siendo un lugar fascinante para observar cómo evolucionan las estrategias y prácticas comerciales en el futuro.